Bandera, música y letra
11 febrero 2007Esa trilogía, bandera-música-letra, ¿es España? No. Pero, ¿representa a España? Para los que viven fuera de España y para muchos bien nacidos de los que seguimos aquí, al oír y ver esos símbolos, se nos ponen los pelos como escarpias, y nos corre un escalofrío por la espalda que nos dura lo que nos dura la existencia.
Ha salido estos días de atrás, un tal López Garrido, portavoz parlamentario del PSOE (más les valiera haber cogido a un mudo), con cara crispada y gritando en una rueda de prensa como si estuviera en la tribuna de oradores (ora charlatanes), que el uso de la bandera nacional (ojo al término: NACIONAL) en una manifestación contra ETA es una «apropiación de un símbolo sagrado», «patrimonio de todos los españoles» que representa «la unidad de todos».
«Cojan esa mosca por el rabo» que diría el ínclito Campmany. O sea, que siendo nacional y patrimonio de todos los españoles no se puede usar la bandera de España en una manifestación de un millón y medio de personas contra ETA -la antiEspaña-. Pues, ¿qué quiere este hombre?, que sean los cuarenta millones y medio de almas -inmigrante más, inmigrante menos- que curten esta piel de toro, esa piel guanche y la balear las que se junten para tal protesta. ¡Ójala fuera así!
Pero si no llegan a ese consenso ¿qué tienen que cantar? ¿Paquito el chocolatero?
Mire usted, señor López, no hay más ciego que el que no quiere ver; ni más sordo que el que no quiere oír; ni más tonto que el que no quiere ni ver ni oír todo lo que acontece a su alrededor y, lo que es peor, que no sepa valorarlo.
Señor López, lo que no se puede es ir de albacea de toda la tontería del secretario general de su partido sabiendo que alberga correligionarios como la ministra Salgado, que tiene problemas con el vino (en el mejor sentido de la frase).
Esta insulsa mujer ha recordado esa letra de canción, tan española ella (la canción), que dice: «Como el vino de Jerez, y el vinillo de Rioja, son los colores que tiene, la banderita española, la banderita española.», y le ha debido decir a López: Diego, si tú reniegas de la bandera, yo prohíbo el vino, para que no haya nada que recuerde a España.
Pues nosotros opinamos que la bandera no es de Garrido, ni de la Salgado, ni de Rajoy, ni de nadie; ni de la izquierda, ni de la derecha. Que es de ESPAÑA desde mucho antes de que éstos, los padres de éstos, los abuelos de éstos… existieran; y que nos encanta y nos gustaría verla en todos los actos -oficiales o no- acompañada del himno y, de una puñetera vez, de su letra.