Federico García Lorca, ¿por qué no te les apareces?
21 diciembre 2009
“Las piquetas de los gallos
cavan buscando la aurora,…”
Pero no son gallos, Federico, son esos pollastres emplumados que quieren vivir de tu recuerdo; que quieren gozar tu muerte en usufructo. Desalmados de un egoísmo córpore insepulto que pretenden no dejar yacer tranquilamente a alguien que si no se ganó la muerte, sí la paz que ella conlleva.
Esos “gibson” destripaterrones de biblioteca que sueñan con soltar su magro epicedio ante ti, ahora que tienes los oídos cerrados para siempre, han profanado la tumba y horadado el panteón que para la mayoría eran los tuyos, para dejar al descubierto una piscina sin agua a la que no se tirarán, pues ya están descerebrados.
Hoy toda la comparsa que alienta esa “Memoria histérica” debería estar en la picota, con las orejas de burro más grandes que se pueda imaginar, purgando el ridículo histórico que han hecho.
Pero, ¿quiénes son? Lo dejó escrito Alberti en “Palabras para Federico”, prólogo de la edición de 1937 de tu “Romancero gitano”: “Conocemos las caras de los que intentan exponer tu cadáver, poniéndolo de pie, para ayudarse a representar la terrible farsa del crimen más horrendo y estúpido cometido en esta guerra. Pero no lo conseguirán.”
Hoy, ahora, ya, no tiene sentido seguir buscando a Federico. Él está en el corazón de todos los que sentimos su poesía, aguardando a la Muerte como quien la conoce.
Un Comentario a “Federico García Lorca, ¿por qué no te les apareces?”
Por d.b el 21 diciembre 2009
Ay los gallos granaínos, las pollas y pollastres! Gibson ha sabido siempre donde está Federico… Pero la verdad no es rentable y ha hecho creer desde un principio que el poeta estaba donde no estaba. «La polla en verso» traerá pronto exclusivas, que acabarán con el cuento. Os doy una pista: Quien encontró a Lorca, hace tiempo que dejó de buscarle.
Un abrazo, gentleman!