Que c’est triste Venancia
6 julio 2010 | Sin comentarios »Diálogos con su chispita
Por Gascón Bolín
Hoy se lo decía a mi chica: —Hace un día insoportable de calor. Está para meterse bajo la ducha y no salir hasta la hora de recoger el primer premio a “La arruga es bella”. O para ir a remar a Venecia (o a El Retiro, que es la Venecia que tenemos aquí, en Madrid), a ver si nos salpica algo de agua y nos refresca, Venancia.
Pues ella que no, que es un orgullo atenderme, que en casa se está guay y que es mejor que me fuera solo. Y me echó de casa. Así que ahí la he dejado limpiando como una posesa. O por lo menos eso parecía cuando me marchaba. Claro que puede que nada más cerrar la puerta se haya sentado con un plato de croquetas ante la tele a ver “Sálvame”, que le pirria. Y la verdad es que si no se limpiase los dedos en el reposacabezas, que luego me siento yo y salgo con el pelo como el de un gitano, me daría igual. A mi, ya, todo lo que haga mi chica me da igual mientras no me pida nada a cambio.
Bueno, el caso es que allí la dejé con fingida cara triste, y yo partí a El Retiro, no sé si huyendo del calor o buscándolo, porque ahí también cocían habas (nunca mejor dicho). Hacía un sopor, una calorina… que menos mal que quitaron la Casa de fieras porque si no estarían todos los bichos disecados. Por cierto, que al pasar por delante de la Casa de fieras he visto un cartel que ponía que ahí mismo se iba ha construir una biblioteca. Ahora que ya no hay leones. ¡Tiene guasa la cosa!